28/03/2024

Salud

Para detectar el coronavirus, científicos del CONICET crearon el primer test serológico en tiempo récord

12/05/2020 |



Julio Caramelo, jefe del laboratorio de Biología Estructural y Celular e investigador del CONICET, dialogó sobre el trabajo de los científicos que desarrollaron el estudio que permite saber si una persona estuvo en contacto con el COVID-19. “Hacer ciencia es costoso, pero no hacer ciencia es más caro todavía”, aseguró.

La intención es llegar a la producción de 500.000 test al mes.

El investigador del CONICET, parte del equipo de científicos que crearon el “COVIDAR IgG”, señaló que el test “detecta los anticuerpos contra el virus”, y “se aplica posterior a la infección, por eso no es útil para un diagnóstico, pero sí para saber si alguien estuvo en contacto con un infectado por el virus”.

“La demanda internacional es tremenda. Si se quisiera comprar este test se podría hacer, el problema es que no se consigue porque la producción está saturada, nosotros lo podemos producir a menos de una décima parte del costo”, destacó.

Julio Caramelo aseguró que, desde el punto de vista tecnológico, lo más difícil es “producir las proteínas del virus”, que se usan como “anzuelo” para detectar en el plasma sanguíneo si la persona tiene o no tiene los anticuerpos. En este sentido, indicó que “lleva una puesta a punto que requiere manejar varias técnicas y la colaboración de laboratorios distintos”.

El trabajo, desarrollado en el marco de la participación conjunta entre el Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación, el CONICET y la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación, funciona a través de tres partes interdependientes. “Una es Andrea Gamarnik, que está en la producción de la proteína, otra es la purificación y el último paso que es el armado del kit”, señaló.

“Lo más difícil es tener el conocimiento del capital humano. Uno puede tener fortunas para comprar equipamiento pero después si no se saben usar, es en vano. Eso lleva muchos años, se genera en décadas, haciendo escuela y generando conocimiento, que es muy difícil de adquirir rápidamente y muy fácil de destruir”, expresó el investigador del CONICET.

El jefe del laboratorio de Biología Estructural y Celular señaló que “un dato fundamental para ver qué decisión se toma con respecto a la apertura de la economía, es saber cuánta gente efectivamente se contagió y no lo sabe”. Paralelamente, el científico remarcó que “si se hace un muestreo poblacional y te das cuenta que la mitad de la población estuvo infectada, es una buena noticia porque quiere decir que ya empezaste a generar una inmunidad de rebaño”.

“La idea es llegar a una producción de unos 500.000 ensayos mensuales. En este momento estamos produciendo alrededor de los 10.000 a 15.000 por semana. Estamos preparando todo para poder llegar al medio millón de test de producción al mes; la distribución y la logística, va a quedar en manos del Ministerio de Salud de la Nación, coordinado con los ministerios provinciales”, destacó.

En referencia al cambio de paradigma político con respecto a la gestión anterior, Julio Caramelo afirmó que “este gobierno prioriza la ciencia”, y además, aseguró que “la ciencia no se desarrolla en cuatro años, tiene un proceso de 20 o 30, independientemente de quien está gobernando, nos tiene que entrar en la cabeza que el único camino al desarrollo verdadero es invertir en esto durante décadas”.

Finalmente, el científico del CONICET destacó que “lo más valioso que tenemos es que hay escuelas en distintos campos de la ciencia”. “Tenemos un buen conjunto de científicos que son muy buenos y necesitan recursos porque la ciencia es cada vez más costosa”, concluyó. (www.REALPOLITIK.com.ar)