Kicillof niega la creación de una empresa estatal de granos y aclara su plan para el puerto de Quequén

En una entrevista con Radio 10, Kicillof respondió a las especulaciones que surgieron en torno a la creación de una empresa estatal de granos. "No está planteado así", afirmó, refiriéndose a la gestión del elevador de granos en Quequén, cuyo funcionamiento como consorcio público-privado se remonta a los años noventa.

El gobernador explicó que, con el vencimiento de la concesión, se está evaluando la posibilidad de llamar a una nueva licitación. Sin embargo, lo que se plantea no es la creación de una empresa estatal, sino una "preferencia, pagando los servicios", para que el Estado pueda utilizar el elevador en beneficio de los pequeños productores, quienes, según Kicillof, son "el eslabón más débil de la cadena", mientras que los intermediarios y la cadena comercial se quedan con la mayor parte de los beneficios.

El puerto de Quequén es un punto estratégico para la exportación, por donde pasan anualmente alrededor de siete millones de toneladas de granos y subproductos. Durante 30 años, la gestión del elevador estuvo a cargo de Terminal Quequén S.A., una empresa que reúne a entidades de productores, exportadores, y la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.

La semana pasada, diversas sociedades rurales del sudeste bonaerense expresaron su preocupación ante la posibilidad de que el gobierno provincial busque quedarse con un 30% de la operatoria del elevador. Esta preocupación se amplificó con versiones de que detrás de esta iniciativa estaba la intención de crear una empresa estatal o una junta provincial de granos, similar a las existentes en el pasado.

El tema generó críticas tanto de la Mesa de Enlace bonaerense como de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires. José Martins, presidente de la Bolsa, señaló que hace más de cuatro años se vienen ofreciendo inversiones de capital por aproximadamente 25 millones de dólares para modernizar la terminal, a cambio de una extensión de la concesión. Sin embargo, hasta el momento, no se han concretado los llamados a licitación.

Martins también advirtió que la falta de definición sobre el futuro de la terminal pone en riesgo la capacidad de ofrecer servicios de elevación para la próxima cosecha fina, que se espera a partir de diciembre. La situación ha llevado a la Mesa de Enlace provincial a solicitar al gobernador que desista de cualquier medida intervencionista que pueda perjudicar al sector productivo.

Mientras tanto, Kicillof se comprometió a brindar más detalles sobre el futuro del puerto en las próximas semanas, buscando calmar las tensiones y aclarar las intenciones de su gobierno en relación a esta importante infraestructura.