Kicillof mostró fuerza en La Plata y lanzó su espacio político: “Tenemos una tarea, ganar en septiembre y ganar en octubre”

“Hoy nos ponemos en movimiento”, anunció desde el escenario montado en el predio de UPCN, acompañado por intendentes, ministros, legisladores, referentes sociales y sindicales.

Desde temprano, la jornada se presentó como un encuentro político, militante y programático, con diez comisiones temáticas en las que se debatieron propuestas sobre economía, producción, salud, educación, seguridad, cultura, ciencia y derechos humanos. El cierre estuvo a cargo del gobernador, que desplegó un discurso con fuerte contenido político, cuestionó duramente el modelo económico de Javier Milei y llamó a conformar un “gran frente bonaerense” de cara a las elecciones legislativas de septiembre y octubre.

Críticas a Milei y advertencia sobre el futuro

Durante su intervención, Kicillof desarmó el discurso oficial sobre la supuesta recuperación económica. “Esto no es ni novedoso ni original: es la continuidad del modelo de Martínez de Hoz, de Cavallo y de Macri”, lanzó, y denunció los efectos del ajuste: caída del salario real, destrucción del empleo, tarifazos y desinversión. “Milei le declaró la guerra al pequeño productor, al trabajo nacional, a la pyme y al pueblo que labura”, sentenció.

Apuntó también contra el endeudamiento y el reciente acuerdo con el Fondo Monetario Internacional: “Este modelo solo cierra con deuda. Es Fondo Monetario o pueblo”. En ese marco, denunció que “para la timba y los bonos siempre hay plata”, y subrayó que “no es ajuste, es transferencia: le sacan al pueblo para darle a las corporaciones”.

“Sin oportunidades no hay libertad”

Uno de los tramos más aplaudidos fue cuando Kicillof confrontó la idea de libertad promovida por el oficialismo nacional. “¿Qué libertad tiene un trabajador que no llega a fin de mes? ¿Qué libertad tiene un pibe si le cierran la universidad?”, preguntó, y concluyó: “Eso no es libertad, es exclusión. Sin oportunidades no hay libertad”.

También defendió su gestión al frente de la Provincia, resaltando que, a pesar del recorte de fondos nacionales, su administración no frenó obras públicas y amplió la infraestructura sanitaria. “Mientras Milei paralizó todo, nosotros abrimos 186 nuevos centros de salud”, aseguró.

Mensajes hacia adentro y hacia afuera del peronismo

Kicillof no eludió las tensiones internas en el peronismo y lanzó un mensaje de unidad, aunque con claras señales de diferenciación. “El único adversario que tenemos es Milei, está afuera, no adentro”, afirmó. Presentó así el MDF como un espacio amplio, “con los brazos abiertos”, y convocó a “todos los sectores a conformar un gran frente bonaerense por la salud, la educación, la seguridad, la producción y el trabajo”.

En un pasaje cargado de simbolismo, citó al general Perón para recordar que “el movimiento jamás fue excluyente”, y dejó un mensaje para quienes promueven una candidatura de Cristina Kirchner desde otro sector del espacio: “No podemos distraernos. Hay que buscar a los decepcionados y hablarle al pueblo, no entre dirigentes”.

La ausencia de Cristina y el trasfondo de la interna

El acto también dejó en evidencia la creciente distancia entre Kicillof y el kirchnerismo duro. Mientras el gobernador reunía a su tropa en La Plata, en el conurbano aparecieron nuevos carteles promoviendo una posible candidatura de CFK en la Tercera Sección Electoral. En su última aparición pública, la expresidenta había lanzado una crítica velada a la línea política del gobernador al señalar que “hay que dejar de ser militantes electorales para volver a ser militantes políticos”.

En la organización del evento no figuraron dirigentes alineados directamente con CFK, lo que confirmó que el gobernador busca consolidar un armado propio, con autonomía, territorio y gestión. “Estamos construyendo otro camino”, expresó un funcionario cercano al mandatario, dando cuenta de la apuesta por disputar la centralidad del peronismo bonaerense.

Lo que está en juego

El mensaje final de Kicillof fue claro: “Tenemos una tarea, ganar en septiembre y ganar en octubre”. Reconoció que las elecciones legislativas son difíciles para el peronismo —“hace 20 años que no ganamos una intermedia”— pero advirtió que el resultado será determinante: “Si Milei gana, va a acelerar. Lo que está en juego es que la motosierra no cruce la General Paz”.

Así, el acto no solo marcó el inicio de la campaña electoral del gobernador, sino también el lanzamiento de su propio proyecto político dentro del peronismo, en un escenario atravesado por disputas internas, un adversario fortalecido en la Nación y una provincia que se vuelve el principal bastión de resistencia frente al modelo de ajuste.