
En diálogo con Quimey Marfil, la pareja se mostró agradecida por el apoyo recibido y esperanzada en que pronto se haga justicia a más de seis meses de ocurrido el femicidio.
Avances en la causa y el desmoronamiento de la coartada
Felipe Vera destacó los significativos avances en la investigación, señalando que solo resta una pericia clave, la "secuencia fáctica" (anteriormente conocida como reconstrucción del hecho), que incorporará elementos tecnológicos y videos para recrear con precisión lo sucedido. "Está bien encaminada, falta una sola prueba", afirmó.
El padre de Magalí rememoró las primeras horas posteriores al hallazgo del cuerpo de su hija, y el shock que vivieron al enterarse de la primera versión de Cerfoglio, quien argumentó que Magalí había tomado el volante y provocado un accidente. Sin embargo, esta coartada se desmoronó rápidamente. Felipe Vera agradeció la labor del fiscal Walter Pierrestegui, quien desde el primer momento, el 1 de diciembre, se movilizó para buscar cámaras y recabar pruebas. "A la una de la tarde ya tenían el video", reveló, lo que permitió desmentir la versión del accidente. "No parecía nada de lo que él decía", enfatizó.
La intuición de su otra hija, Melina, también fue crucial. "Mi hija, mi niña, ella se dio cuenta que no era un accidente, que había algo raro", expresó Felipe, quien también resaltó la excelente labor del fiscal titular, Marco Vendesky. Los Vera esperan que la causa sea elevada a juicio este mismo año, dada la solidez de la documentación y las pruebas.
La cínica llamada del padre de Cerfoglio
Felipe relató el angustiante momento en que recibió una llamada del padre de Javier Cerfoglio en la madrugada. Se encontraban regresando de una boda familiar donde Magalí había preparado la torta. "Recibo un llamado y se cortó, me voy afuera buscando señal y encuentro la llamada del padre de [Cerfoglio] y se me heló la sangre", confió. El padre de Cerfoglio, con un tono "cínico", le preguntó si Magalí estaba con ellos. "Sabía lo que había pasado", aseguró Felipe, dado que su propio hijo le había informado que "se habían caído al agua" y que "a Maggie no la podemos encontrar". La desesperación los llevó a regresar de inmediato, encontrándose con la trágica escena y el inicio de la investigación.
Felipe también compartió la desesperación del momento en que su hija Melina exclamaba: "¡Este la mató!". Aunque él no lo creía en ese instante, el relato de Cerfoglio, quien afirmaba haberse desmayado y que Magalí no estaba a su lado al despertar, no lo convencía. La búsqueda incansable de la familia por la costa, con la esperanza de encontrarla con vida, contrastó con el hallazgo del cuerpo de Magalí en la dirección opuesta.
El calvario de la familia y el anhelo de justicia
Estela, la mamá de Magalí, expresó el profundo shock en el que se encuentra la familia, que ha estado rodeada de profesionales de la salud mental para afrontar la tragedia. "Lo que menos queremos es que se muera, lo único que nosotros queremos es que pague", sentenció Estela, con la voz quebrada, haciendo hincapié en que sus nietos son la prioridad. "Nada más que justicia", enfatizó.
Finalmente, Estela reveló detalles sobre la relación de Magalí con Cerfoglio. Allí, contó que la pareja había tenido una breve separación apenas unos meses antes del femicidio, y que la última vez que vio a su hija con vida, Magalí le manifestó su cansancio y frustración con Javier, diciendo: "Tengo las pelotas llenas". Se despidió prometiendo contarle todo al día siguiente, pero esa conversación nunca se concretó.
La pareja había estado separada en julio por una semana debido a la agresividad verbal de Cerfoglio, quien también había perdido su trabajo y le había pedido a Magalí que dejara su vocación por la pastelería. Se habían reconciliado con la condición de que él hiciera terapia y dejara de ser agresivo con ella y con su hijo. Sin embargo, lo que sucedió en diciembre puso fin a toda esperanza.
Finalmente, los padres de Magalí resaltaron el apoyo y acompañamiento recibidios desde la Dirección de Género de la Municipalidad y de toda la comunidad en general, así como también volvieron a destacar el trabajo de los abogados y los fiscales que intervinieron en la causa.
La comunidad de Necochea sigue de cerca el caso de Magalí Vera, esperando que la justicia actúe con celeridad y rigor para que Javier Cerfoglio responda por sus actos con la única pena posible dada la carátula y los agravantes del caso: perpetua.