
Durante la jornada del miércoles, las ráfagas de viento provenientes del norte y noroeste podrían alcanzar los 70 kilómetros por hora, especialmente en horas de la noche. El organismo nacional advirtió que el área será afectada por vientos sostenidos de entre 30 y 40 kilómetros por hora, con ráfagas de hasta 60.
Según el sitio Meteored, a partir del viernes se espera un marcado descenso de presión atmosférica por la interacción de distintos sistemas, lo que generará un profundo ciclón extratropical sobre el Océano Atlántico, muy cerca de la costa bonaerense. Este fenómeno provocará lluvias persistentes, posibilidad de tormentas con caída de granizo y acumulados de entre 30 y 50 milímetros en algunas zonas del este del país, lo que podría generar anegamientos en áreas urbanas o rurales con mal drenaje.
El fin de semana, en particular el sábado, será clave en el desarrollo del fenómeno. Se espera una ciclogénesis al sudeste de la provincia, con la formación de un centro de baja presión que derivará en una sudestada con vientos del sudeste que podrían superar los 60 o 70 km/h, y la continuidad de lluvias intermitentes. Las localidades costeras como Necochea, Mar del Plata, Villa Gesell, Pinamar y Monte Hermoso estarán especialmente expuestas a los efectos de esta situación.
Las autoridades recomiendan evitar actividades náuticas, asegurar objetos que puedan ser desplazados por el viento, extremar la precaución al circular por rutas costeras y mantenerse informado a través de los canales oficiales del Servicio Meteorológico Nacional.
Aunque estos fenómenos son típicos del invierno, la intensidad que se prevé podría generar complicaciones puntuales en zonas bajas o próximas al mar.