
El texto difundido por la fuerza libertaria detalla que, a partir del 19 de agosto, quienes no tengan médico de cabecera deberán llamar al número 2262-364901, pero solo durante una hora al día —de 12:00 a 13:00— para gestionar recetas y órdenes médicas electrónicas. El sistema prevé otorgar apenas 20 turnos diarios para el día siguiente.
Para muchos, el anuncio agrava el problema en lugar de resolverlo. Desde hace días, jubilados se amontonan en la puerta de PAMI para intentar conseguir atención o volver al hospital con sus órdenes médicas. “¿Cuántas personas pueden ser atendidas en una sola hora? ¿Esto es todo lo que pudieron gestionar?”, se preguntan con bronca algunos de los afectados.
El enojo crece también por la forma en que se comunicó la medida. Que un partido político sea el vocero de un organismo estatal reaviva las críticas contra la mezcla de política partidaria y gestión pública, algo que el propio Javier Milei ha denunciado como “la casta”. La contradicción no pasó desapercibida.
“Después de tantas promesas de cambio, la solución que ofrecen es un teléfono que solo funciona una hora al día y para muy pocos. Es un parche que deja afuera a la mayoría”, señalan desde un sector crítico.
El comunicado deja en evidencia el manejo partidario de una entidad pública nacional por parte de Mariano Valiante y Juan Cerezuela.