
* por Quimey Marfil
Francia fue la sede de la XVI Copa Mundial de la FIFA, la última del milenio. La candidatura francesa se había impuesto por 12 votos contra 7 a Marruecos en la votación realizada por el Comité Ejecutivo de la FIFA el 2 de julio de 1992 en su sede de Zúrich. De esta forma, el país galo se convertía en el tercer país en organizar dos Mundiales después de México e Italia.
Para esta edición se amplió el cupo de participantes a 32 selecciones, ocho más que en los mundiales anteriores, las cuales se dividirían en ocho grupos de cuatro selecciones, clasificando las dos primeras de cada grupo a octavos de final, desde donde se eliminarían por eliminación directa hasta la final. Es decir, el mismo sistema que se sigue utilizando en la actualidad. La ampliación de la cantidad de participantes permitió que nuevas selecciones hicieran su debut en un Mundial: Jamaica, Japón, Croacia (que hacía su primera participación tras la disolución de la República Socialista de Yugoslavia) y Sudáfrica, a la que por primera vez se le permitía participar luego de haber estado excluida hasta principios de los ’90 debido al Apartheid. Curiosamente, al igual que en el Mundial anterior, donde dos de las tres selecciones debutantes habían estado en el grupo de Argentina, el sorteo deparó que nuestra selección debiera enfrentarse en primera fase con selecciones debutantes: Japón, Jamaica y Croacia. El sorteo se realizó el 4 de diciembre de 1997 y los cabezas de serie fueron Francia, Brasil, Alemania, Argentina, España, Italia, Holanda y Rumania.
El Mundial se puso en marcha el 10 de junio. Como era tradición desde 1974, el partido inaugural lo jugó el último campeón, Brasil, que derrotó a Escocia 2 a 1 por el grupo A. El grupo lo completaban Marruecos y Noruega que esa misma noche igualaron en dos goles. Brasil volvió a repetir triunfo seis días más tarde frente a Marruecos y se aseguró tanto la clasificación como el primer lugar en el grupo. Con la clasificación asegurada cayeron en la última fecha ante Noruega que se aseguró el segundo lugar y la clasificación a octavos.
El grupo B lo integraron Italia, Camerún, Chile y Austria. Italia empató frente a Chile en el debut y derrotó posteriormente a Camerún y Austria para liderar la zona. El otro clasificado fue Chile que igualó sus tres partidos. Austria, que convirtió tres goles en todo el Mundial, uno en cada partido, los hizo todos a los 90 minutos o en tiempo de descuento. Aun así, los goles agónicos no le sirvieron a los austríacos para clasificar.
En el grupo C se ubicaron los anfitriones, Francia, junto a Dinamarca, Sudáfrica y Arabia Saudita. Los franceses fueron superiores a sus rivales y ganaron sus tres partidos con goleadas incluidas frente a Sudáfrica y Arabia Saudita. Los daneses fueron los otros clasificados del grupo.
El grupo D se presentaba como el “grupo de la muerte” con España, Bulgaria, Nigeria y Paraguay. España aparecía como cabeza de serie, pero Bulgaria llegaba confiada después de la cuarta ubicación obtenida en el Mundial anterior, Nigeria también había mostrado buen nivel en el último Mundial y llegaba con la chapa de Campeón Olímpico, luego de derrotar en la final de los JJOO de Atlanta 1996 al seleccionado argentino. Paraguay, por último, había hecho una buena eliminatoria se ilusionaba con meterse entre los dieciséis mejores de la Copa. Paraguayos y búlgaros no se sacaron ventajas en el debut, mientras que Nigeria, en uno de los mejores partidos del campeonato, derrotó a España 3 a 2. En la segunda fecha las “Águilas verdes” repitieron el triunfo ante Bulgaria, y con el empate entre Paraguay y España se aseguraron la clasificación y el primer puesto. En la última fecha España goleó 6 a 1 a Bulgaria pero no le alcanzó, ya que Paraguay derrotó por 3 a 1 a Nigeria, y con cinco puntos frente a cuatro de los españoles se metieron en la segunda fase.
En el grupo E se ubicaron Holanda, Bélgica, México y Corea del Sur. Holanda lideró el grupo con cinco unidades luego de golear a Corea por 5 a 0 y empatar sus otros partidos. México también finalizó con 5 puntos aunque con peor diferencia de gol que los holandeses y clasificó a octavos gracias a un empate sobre la hora ante Holanda en la última fecha y a que Bélgica no pudo derrotar a la débil selección coreana.
Por el grupo F se enfrentaron Alemania, Yugoslavia, Irán y Estados Unidos. Las selecciones europeas fueron claramente superiores y derrotaron en sus respectivos encuentros a iraníes y norteamericanos. Sin embargo, Irán y Estados Unidos disputaron su propia final en un encuentro en el cual se tomaron medidas especiales de seguridad dados los conflictos diplomáticos que ambos países arrastraban desde hacía dos décadas. Aunque no le sirvió para clasificar, el triunfo por 2 a 1 fue festejado en todo Irán como una auténtica cuestión de Estado.
En el grupo G estuvieron Rumania, Inglaterra, Colombia y Túnez. Colombia había hecho una gran eliminatoria y buscaba lavar la mala imagen que había dejado su participación en el Mundial anterior. Sin embargo comenzaron con el pie izquierdo siendo derrotados por Rumania 1 a 0 en el debut. Inglaterra, por su parte, venció al conjunto africano por 2 a 0. El triunfo colombiano en la segunda fecha ante Túnez y la victoria rumana frente a Inglaterra dejaba a colombianos e ingleses con la posibilidad de disputar mano a mano la segunda ubicación del grupo en la última fecha. El 26 de junio, en Lens, el conjunto británico derrotó 2 a 0 a Colombia con un gran gol de tiro libre de David Beckham y dejó nuevamente al conjunto cafetero con una sensación de fracaso al no poder pasar la primera ronda.
Por último, en el grupo H se ubicó Argentina junto a tres debutantes, Japón, Jamaica y Croacia. Sin hacer un gran partido, la selección nacional venció en el debut el 14 de junio a Japón por 1 a 0, con gol de Batistuta. Una semana más tarde, en el Parque de los Príncipes, de París, Argentina mejoró su imagen y goleó a Jamaica 5 a 0 con tres goles de Gabriel Omar Batistuta y dos del “burrito” Ortega. En la última fecha, con varios suplentes, Argentina venció 1 a 0 a Croacia con gol de Mauricio Pineda y se aseguró el primer lugar en el grupo con puntaje perfecto y sin recibir goles en contra. Croacia, que había ganado sus dos partidos previos, fue el otro clasificado.
El 27 de junio se pusieron en marcha los octavos de final con el triunfo de Italia por la mínima anta Noruega. En un duelo sudamericano Brasil goleó 4 a 1 a Chile con goles de César Sampaio y Ronaldo, que facturaron por duplicado cada uno. Francia y Paraguay no se sacaron ventajas durante los 90 minutos y debieron ir a tiempo suplementario, en el que los locales se impusieron gracias al primer gol de oro de la historia de los mundiales convertido por Laurent Blanc. Nigeria no pudo ratificar su buen nivel y fue goleada por 4 a 1 por Dinamarca, que por primera vez se clasificó a cuartos de final de un Mundial. México se puso en ventaja frente a la poderosa selección alemana y estuvo cerca de eliminarla, pero dos goles de Klinsmann y Bierhoff en el último cuarto de hora le dieron la clasificación a Alemania. En tiempo de descuento Holanda derrotó a Yugoslavia con goles de Dennis Bergkamp y Edgar Davids. Con un gol de penal de Davor Suker, quien terminaría como goleador del Mundial con seis tantos, Croacia derrotó a Rumania 1 a 0 y empezó a convertirse en la selección “sensación” del torneo.
El último partido de octavos fue sin duda el más emotivo. Argentina e Inglaterra volvían a disputar un auténtico clásico, en el que los ingleses buscaban tomarse revancha de lo que había sido el triunfo argentino por los cuartos de final de México ’86. Argentina se puso rápidamente en ventaja con gol de penal de Batistuta, pero Inglaterra empató cuatro minutos más tarde por la misma vía a través de Alan Shearer y logró ponerse en ventaja con un golazo de Michael Owen, posteriormente elegido Mejor jugador joven del torneo. En el tiempo de descuento del primer tiempo Argentina logró empatar con un gol de Javier Zanetti a través de una jugada preparada de tiro libre. En el segundo tiempo ambos seleccionados no se sacaron ventajas y debieron ir a un tiempo suplementario en el cual tampoco se movió el marcador. Con el 2 a 2 a lo largo de 120 minutos fue necesario recurrir a una definición por penales en la cual Argentina logró imponerse por 4 a 3 gracias a dos penales atajados por Carlos “lechuga” Roa. Argentina volvía a eliminar a Inglaterra y se metía entre los ocho mejores del Mundial.
Los cuartos de final se iniciaron con el duelo entre Francia e Italia. Sesenta años antes, en el primer Mundial disputado en Francia en 1938, los locales habían sido eliminados precisamente ante la selección italiana, eventualmente ganadora del campeonato. Esta vez, los galos buscaban tomarse revancha y dejar afuera al finalista del último certamen. Y así fue, tras igualar sin goles en tiempo reglamentario y en el suplementario, los locales fueron más efectivos desde los doce pasos y se metieron en semifinales. En un gran partido Brasil eliminó a la selección danesa por 3 a 2 con un gol de Bebeto y dos de Rivaldo en un encuentro que Dinamarca había empezado ganando casi desde el vestuario con un gol a los dos minutos de juego.
Argentina se jugaba el pase a semis en un duro cruce ante Holanda. La selección naranja se puso en ventaja con un gol de Patrick Kluivert a los 12 minutos, pero cinco minutos más tarde Argentina consiguió el empate a través del “piojo” López. El resto del partido fue trabado y parecía que se encaminaba a un nuevo tiempo suplementario, pero a falta de un minuto para el final un gran gol de Dennis Bergkamp señaló el 2 a 1 con el que Holanda se metió en semifinal. Un par de minutos antes Argentina había quedado con diez jugadores luego de que Ariel Ortega diera un cabezazo al arquero neerlandés Edwin Van der Sar. En el último partido de cuartos de final la sorprendente selección croata hizo historia al golear 3 a 0 a Alemania y meterse en semifinales en su debut mundialista. Después de tres finales consecutivas entre 1982 y 1990 los siempre duros alemanes quedaban eliminados en cuartos de final por segundo Mundial consecutivo. Eso sí, los siguientes cuatro mundiales los germanos no se bajarían del podio, incluido el campeonato obtenido en 2014…
El fixture del torneo enfrentó a Brasil y Holanda por la primera semifinal y a los anfitriones con Croacia en la otra. En un intenso partido en el Estadio Vélodrome de Marsella brasileros y holandeses igualaron 1 a 1. Brasil se había puesto en ventaja con gol de Ronaldo, posteriormente elegido el Mejor jugador de la Copa, pero Holanda empató a falta de tres minutos para el final gracias a un nuevo gol de la “pantera” Kluivert. Los brasileros no cometieron errores en los penales y se metieron por segunda edición consecutiva en la final de la Copa del Mundo. El otro finalista fue el local, Francia, que terminó con las esperanzas de Croacia al imponerse por 2 a 1. Los croatas completarían un excelente Mundial al vencer tres días más tarde a Holanda en el partido por el tercer puesto y subirse al podio en su primera Copa Mundial.
La final se jugó el 12 de julio en el flamante Stade de France de Saint-Denis, en las afueras de París, construido específicamente para el Mundial y con capacidad para 80.000 espectadores. Previo a la final la figura de Brasil, Ronaldo, sufrió una serie de convulsiones que casi lo marginan de la final. Pese a las sugerencias de alguno de los médicos, el fenómeno fue incluido en el once inicial de la verdeamarela, aunque su nivel en el encuentro decisivo estuvo lejos del mostrado en los partidos anteriores. Francia jugó su mejor partido del campeonato y con un gran primer tiempo logró irse en ventaja al descanso dos goles a cero, con dos goles de su figura, Zinedine Zidane. Brasil no pudo descontar en la segunda mitad y con el partido ya definido el mediocampista Emmanuel Petit marcó en tiempo de descuento el 3 a 0 definitivo con el que Francia obtuvo, en su casa, su primera Copa Mundial. Después de Uruguay, Italia, Inglaterra, Alemania y Argentina, los franceses se convertían en la sexta selección en coronarse campeón en su país.