28/03/2024

Opinión

El mejor regalo en estos 140 años

14/10/2021 |



*Por Alejandro Sanchez

Una organizada,  concurrida y correcta celebración por el 140° aniversario de la fundación Necochea se desarrolló en la plaza Dardo Rocha .

Muchos vecinos y turistas se acercaron a la plaza Dardo Rocha para ser parte de estos festejos, o sea en el mismo lugar donde en 1881 se fundó nuestra ciudad. Un dato importante a destacar es el carácter local que se le dió a la celebración. Lo que hizo una conexión distinta entre quienes participaron, ya sea con un espectáculo, juegos, emprendedores, artesanos y el público en general.

Más allá de eso, lo importante es pensar que festejamos hoy. Porque desde hace tiempo venimos siendo protagonistas y testigos del deterioro de nuestra ciudad, esto en diferentes cuestiones, desde la parte laboral, productiva como turística. Que son ni más ni menos el motor económico de la ciudad. Y con ello va aparejado el desarrollo y el crecimiento de la comunidad.

Acá parece que esa trillada frase sobre que “todo tiempo pasado fue mejor” se confirma. Y podemos decir que si, es más, Necochea vive de recuerdos y de un pasado que ya no es. No es  extraño escuchar historias de otros tiempos donde todo era lindo, alegre y encima la ciudad crecía y era sinónimo de progreso.

Pero eso ya pasó y ahora tenemos otra realidad, la ciudad no pasa por un buen momento, aunque se intenta levantar. Son muchas las problemáticas a enfrentar y dotar de mejor calidad de vida a necochenses y quequenenses es urgente.Y aquí, quizá radica lo más positivo de este momento. Cada vez son más las personas que se involucran desde su lugar para que Necochea mejore y que vecinos y vecinas puedan vivir mejor .

Para eso es necesario que haya oportunidades, tanto desde lo laboral como en lo educativo y comercial, que quien desee realizar una inversión sepa que no va a tener trabas para desarrollar su propuesta. Es necesario que haya una diversificación que no sea campo o pesca o turismo, sino que se complementen y desde ahí que se haga lo posible para que se radiquen industrias y esa labor se transforme en un efecto cadena y así se pueda llegar a todos los sectores.

No necesitamos espejitos de colores, ni mega promesas, sólo hay que organizarse, fijar prioridades y que de una vez por todas el apoyar y tirar todos para el mismo lado sea cierto, ese es el mejor regalo qué se le puede hacer a la ciudad.