28/03/2024

Radio Maestra

Historia de los mundiales: Suecia 1958 - "El desastre de Suecia"

02/10/2022 |



* por Quimey Marfil

Mientras se desarrollaba la Copa del Mundo de Suiza, en 1954, la FIFA organizó su XXIX Congreso General para ratificar dónde se celebraría la siguiente edición del Mundial. Suecia había sido la elegida en 1950, aunque según el tácito acuerdo de alternancia, la Copa de 1958 debía disputarse en América. Sin embargo, la calidad de los estadios y las instalaciones inclinó la balanza en favor del país escandinavo.

Se inscribieron para participar del Mundial 56 selecciones, que disputarían eliminatorias hasta definir las 16 que participarían del torneo. Por Europa los clasificados fueron, además de los anfitriones suecos, y los alemanes (clasificados como campeones defensores), Inglaterra, Francia, Hungría, Checoslovaquia, Austria, la URSS (que por primera vez participaba de un Mundial), Yugoslavia, Irlanda del Norte (que dejó afuera del camino a Italia), Escocia y Gales. Los galeses fueron los últimos en clasificar gracias a una serie de circunstancias geopolíticas fortuitas: varios países con mayoría musulmana como Egipto, Indonesia y Turquía se habían retirado por conflictos políticos con Israel (sólo dos años antes se había librado la Guerra del Sinaí tras el Conflicto por el Canal de Suez), por lo cual los israelíes clasificaban automáticamente al Mundial sin haber disputado un solo partido. Al ver esta situación la FIFA decidió que Israel jugara un repechaje contra un “Lucky loser”. Se propuso el cupo a Italia y a Uruguay (ambos sorpresivamente eliminados en sus respectivas Eliminatorias), pero ambos países lo rechazaron. Finalmente la FIFA le hizo la propuesta al seleccionado galés, quienes aceptaron la invitación, y luego de vencer con un 4 a 0 global a los israelíes, clasificaron por primera vez a un Mundial. De esta forma, por primera y única vez, las cuatro selecciones del Reino Unido participaron de una Copa del Mundo. Por Sudamérica clasificaron Brasil, Argentina y Paraguay, quien sorpresivamente eliminó a Uruguay. Por último, México obtuvo el cupo para Centro y Norteamérica.

Las 16 selecciones se dividirían en 4 zonas de 4, dentro las cuales jugarían todas contra todas y las dos primeras de cada una clasificarían a cuartos de final, para luego eliminarse a partido único hasta la final. Este sistema se utilizaría durante cuatro Mundiales.

El grupo 1 emparejó a Alemania Federal, Checoslovaquia, Irlanda del Norte y Argentina. Todo era confianza en Argentina. Tan sólo un año antes la selección había arrasado en el Sudamericano jugado en Perú con un grupo de jóvenes que derrochaban talento y rebeldía y que pasaría a la historia como los “carasucias de Lima” y había clasificado con contundencia al Mundial tras eliminar a Chile y a Bolivia. Sin siquiera ver videos de cómo jugaban sus rivales, muchos creyeron que se iba a Suecia a buscar la copa. La historia sería bien distinta… En el debut Argentina se enfrentó a los vigentes campeones, Alemania Federal. Dos goles de Rahn, el héroe de la final del Mundial anterior y uno de Seeler sellaron la victoria para los teutones por 3 a 1 ante una selección argentina que había comenzado ganando con gol de Corbatta. Argentina se recuperó en el segundo partido y se impuso 3 a 1 ante los norirlandeses con goles de Corbatta, Menéndez y Avio, y debía jugarse la clasificación en la última fecha ante Checoslovaquia. El resultado fue la peor derrota de la historia de nuestra selección (posteriormente igualado por la selección de Maradona ante Bolivia y la de Sampaoli ante España): 6 a 1 y baile incluido. El “Desastre de Suecia”, tal como sería conocida esa experiencia mundialista, marcaría el fin del ciclo de 19 años de Guillermo Stábile al frente del seleccionado durante los cuales había cosechado seis títulos continentales. Alemania e Irlanda, que eliminó en un partido repechaje a Checoslovaquia, fueron los clasificados a cuartos de final.

Por el grupo 2 clasificaron Francia y Yugoslavia, quienes se impusieron a Paraguay y Escocia. Los franceses contaban con una potente delantera encabezada por Just Fontaine que se convertiría en el máximo goleador de la Copa del Mundo con 13 goles (récord histórico). En el grupo 3 se ubicaron los anfitriones, Hungría, Gales y México. Los suecos clasificarían en primer lugar, mientras que Gales y Hungría debieron jugar un repechaje para definir al otro clasificado, que terminó favoreciendo a los galeses.

El grupo 3 emparejó a Brasil, Inglaterra, Austria y la URSS. Brasil se impuso en la primera fecha ante los austríacos por 3 a 0 y empató sin goles ante Inglaterra en el segundo encuentro. No conformes con el rendimiento del equipo, los referentes de la verdeamarela se reunieron con el técnico Vicente Feola y le exigieron que incluyera en el equipo titular a dos jóvenes suplentes de 17 y 24 años: Edson Arantes do Nascimento y Manoel Francisco Dos Santos. El mundo los conocería como Pelé y Garrincha y ya nada volvería a ser igual. Por la última fecha del grupo Brasil derrotó a los soviéticos por 2 a 0 con dos goles de Vavá y destacadas actuaciones de las jóvenes promesas. A partir de ahí Brasil fue una máquina. El otro clasificado del grupo fue la URSS, luego de derrotar en un partido desempate a la selección inglesa.

Por los cuartos de final Brasil derrotó 1 a 0 a Gales con gol de Pelé, Francia goleó 4 a 0 a Irlanda del Norte con dos goles de Fontaine, Alemania derrotó por la mínima a Yugoslavia con gol de Rahn, mientras que los locales vencieron por 2 a 0 a los soviéticos. En las semifinales la máquina brasilera se impuso con contundencia ante los franceses por 5 a 2 con tres goles de Pelé, mientras que los suecos sorprendieron a los campeones alemanes y los vencieron por 3 a 1 luego de haber empezado perdiendo el encuentro. Brasil buscaba sacarse la mufa del Maracanazo y convertirse en la primera selección en consagrarse campeón fuera de su continente. Suecia deseaba ser el tercer anfitrión en levantar la Copa del Mundo.

Previo a la final, Francia derrotó en el partido por el tercer puesto a Alemania en un auténtico clásico que finalizó con triunfo galo por 6 a 3 con cuatro goles de Fontaine. La final se jugó el 29 de junio en el estadio Rasunda de Solna, en las afueras de Estocolmo ante 50.000 espectadores. Los suecos sorprendieron de entrada con un gol a los 4 minutos. Pero dos goles de Vavá a los ‘9 y a los ’32 encaminaron la final para los brasileros que se fueron 2 a 1 arriba al descanso. En la segunda mitad Brasil amplió la ventaja con un golazo de Pelé y otro de Zagallo. Suecia descontó a diez del final y se ilusionó con una remontada histórica, pero un nuevo gol de Pelé sobre la hora sentenció la final: Brasil volvía a golear 5 a 2 y se consagraba campeón del mundo por primera vez en su historia. Por primera y única vez un seleccionado no europeo salía campeón en el viejo continente y Pelé empezaba a escribir su historia grande consagrándose como el campeón mundial más joven con tan sólo 17 años.