En el tramo final del juicio a los cuatro policías que se desempeñaban en la Comisaría Segunda de Quequén cuando murió “Noa” Suárez, hace nueve años, la Fiscalía sostuvo que para Fernando Pérez Zenatti, Matías Germán Larrea y Héctor Daniel Allamanla la imputación debía ser tortura seguida de muerte y, por lo tanto, les cabe la pena de prisión perpetua. Sin embargo, se pidió subsidiariamente que se los condene por tortura y homicidio culposo, lo que bajaría la pena a 19 años de prisión.
Por su parte, para Yanina Paola Mohana le sostuvo la carátula inicial, de homicidio culposo, por lo que se le pidió una pena de tres años de prisión, siendo la que más posibilidades tiene de salir excarcelada.
Por otro lado, los abogados defensores pidieron la absolución de los cuatro acusados porque consideraban que no se había podido probar durante el juicio la culpabilidad en los hechos de torturas de los que se los acusa.
Al momento de declarar, Héctor Daniel Allamanla dijo que estaba viviendo una tortura y que quería que todo esto se termine para poder recuperar su vida y su familia.
Fernando Pérez Zenatti dijo que él ingresó a la Policía para trabajar y no para matar a nadie y Matías Larrea, que estuvo en el juicio de manera virtual al igual que su abogado, decidió no declarar.
Según los colegas de “Ecos Diarios”, los cuatro acusados se declararon inocentes y lamentaron la muerte del joven de 20 años “Noa” Suárez, aunque la Fiscalía pidió la inmediata detención de los acusados, al menos de los tres que tienen la acusación más grave.
El martes próximo, a las 12, darán su veredicto los jueces del Tribunal.
Por otra parte, la Fiscalía pidió investigar a Germán Herold, que era jefe del Comando hasta hace pocos días, y pidió que se lo investigue por falso testimonio e incumplimiento del deber de funcionario público.
También pidió que se investigue a Guillermo Farías, que era en el momento de la muerte de “Noa” el jefe de la Comisaría Segunda, donde se produjo el hecho.-
