Los días elegidos son:
Viernes 2 de mayo, tras el Día del Trabajador.
Estos días no laborables buscan promover el turismo interno en temporada baja, tras un año complicado para el sector. Desde el Ejecutivo destacan que la medida apunta a mitigar la estacionalidad y dinamizar las economías locales, especialmente en destinos tradicionales.
La Ley 27.399 permite al Gobierno fijar hasta tres días con este propósito cada año, sumándose a los feriados nacionales inamovibles y trasladables. Sin embargo, es clave distinguir que los "días no laborables" permiten al empleador decidir si sus empleados trabajan, sin obligatoriedad de pago extra, a diferencia de los feriados.
Aunque la Cámara Argentina de Turismo había solicitado otro fin de semana largo adicional, la propuesta no prosperó. Este año, el sector turístico espera aprovechar los nuevos puentes para compensar las pérdidas recientes por el atraso cambiario y el ajuste económico.