Los incendios forestales que azotan Los Ángeles desde el 7 de enero se han convertido en una de las tragedias naturales más devastadoras en la historia reciente de California. Con condiciones climáticas extremas impulsadas por los vientos de "Santa Ana" y una sequía prolongada, las llamas han arrasado más de 11.000 hectáreas, destruido 1.000 estructuras y obligado a la evacuación de más de 130.000 personas.
El sheriff Robert Luna informó que los equipos de emergencia enfrentan serias dificultades para controlar el avance del fuego, que sigue afectando a zonas residenciales y turísticas. "El terreno afectado es extenso y las llamas complican enormemente las labores de búsqueda y rescate", señaló.
Entre los damnificados destacan figuras del entretenimiento como Mandy Moore, quien relató en redes sociales su evacuación junto a sus hijos y mascotas. "Estoy devastada por la destrucción y la pérdida. No sé si nuestra casa se salvó", compartió la actriz.
Otras celebridades como Mark Hamill, Ben Affleck y Adam Brody también fueron evacuadas de sus residencias en zonas afectadas como Pacific Palisades y Malibú. En el caso de Brody y su esposa, Leighton Meester, se confirmó la pérdida total de su hogar.
Los incendios no solo han devastado propiedades privadas, sino también afectado la industria del entretenimiento. Universal Studios cerró sus puertas como medida de precaución, y eventos como los Critics Choice Awards y estrenos cinematográficos fueron pospuestos. Incluso la Academia de los Oscars reprogramó las fechas de votación debido al caos.
El gobernador de California, Gavin Newsom, enfatizó que los incendios son parte de una nueva realidad climática. "Ya no hay temporada de fuego; hay año de fuego", declaró.
Mientras tanto, el presidente Joe Biden declaró las áreas afectadas como "zonas catastróficas", desbloqueando fondos federales para la reconstrucción y asistencia a las víctimas.
Los expertos alertan que este podría ser el incendio forestal más costoso en la historia de Estados Unidos, con daños materiales y ambientales aún por contabilizar. La comunidad californiana enfrenta un largo camino hacia la recuperación.