
El presidente Javier Milei arribó sorpresivamente a Bahía Blanca este miércoles para supervisar las labores de asistencia tras el violento temporal que azotó la ciudad el pasado viernes, causando al menos 16 víctimas fatales y dejando a miles de personas evacuadas.
Acompañado por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos; la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei; y los ministros de Seguridad y Defensa, Patricia Bullrich y Luis Petri, respectivamente, el mandatario llegó sin previo aviso y sin la presencia de medios de comunicación, buscando evitar que su visita fuera interpretada con fines políticos.
Durante su estancia, Milei se reunió con el intendente Federico Susbielles en el Centro de Monitoreo municipal, donde evaluaron la situación actual y coordinaron las acciones de asistencia y reconstrucción. Posteriormente, el presidente visitó una planta potabilizadora de agua y un puente táctico instalado por las fuerzas federales para restablecer la conectividad en las zonas afectadas.
La visita de Milei se produce en medio de críticas de la oposición, que lo acusaban de desvincularse de la tragedia que afecta a Bahía Blanca. La presencia del presidente busca reforzar el compromiso del Gobierno nacional en la asistencia y recuperación de la ciudad.
Mientras tanto, la comunidad continúa movilizándose para ayudar a los damnificados. Este miércoles por la mañana, arribó a Bahía Blanca un tren solidario proveniente de la estación Constitución, transportando 1.300 toneladas de donaciones, incluyendo alimentos, ropa, calzado y otros insumos esenciales para los afectados por el temporal.
La catástrofe, que dejó al menos 16 muertos y más de 1.450 evacuados, ha generado una ola de solidaridad en todo el país, con campañas de donaciones y colectas para asistir a los afectados. Las autoridades locales y nacionales continúan trabajando en conjunto para brindar asistencia y planificar la reconstrucción de la ciudad