
Esta iniciativa no solo promueve el bienestar físico, sino que también contribuye al fortalecimiento de la autoestima y al desarrollo de habilidades sociales y cognitivas.
Las clases se desarrollan los lunes, miércoles y viernes de 10 a 11 en el piso de deportes del Club Rivadavia. Durante cada encuentro, los participantes disfrutan de un espacio adaptado a sus necesidades, donde pueden aprender y divertirse mientras mejoran su coordinación, concentración y confianza en sí mismos.
El deporte como herramienta de inclusión es fundamental para mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad. En este sentido, el básquet de integración representa una alternativa valiosa para fomentar la igualdad de oportunidades y el desarrollo personal de cada jugador.
Para más información sobre la actividad, los interesados pueden acercarse al Club Rivadavia en los horarios de entrenamiento y conocer más sobre esta propuesta que apuesta al deporte como un puente hacia la integración.